¿Es malo ser hombre? Masculinidad, machismo y heteropatriarcado
¿Es malo ser hombre? Masculinidad, machismo y heteropatriarcado Introducción El debate en torno a la identidad sexual y los problemas que de ello se derivan es de máxima actualidad: feminismo, grupos LGTBI, masculinidad, machismo, feminidad, micromachismos, violencia de género, etc. Es, por supuesto, un tema espinoso, pero quiero arriesgarme a plantear algunas reflexiones al respecto sobre una cuestión que me resulta particularmente cercana, la masculinidad, un rasgo humano que no vive sus mejores momentos entre otras razones por su solapamiento, consciente o inconsciente, querido o involuntario, con el machismo. ¿Es el hombre naturalmente machista? ¿Tiene incrustada naturalmente la prepotencia y la agresividad? ¿O, en realidad, ser hombre es algo distinto y diverso que puede derivar en algunos casos, pero no siempre ni necesariamente en el atropello del otro y, en particular, de la mujer? El camino que puede iluminar estos interrogantes comienza con el patriarcado clásico, prosigue con