EL TRASFONDO SAPIENCIAL DE LOS ESTUDIOS DE FILOSOFÍA
Por José V. Bonet Sánchez, Profesor de Filosofía en La UCV San Vicente Mártir Se ha dicho que la filosofía no es un saber, sino una reflexión sobre los distintos saberes disponibles[1]. En realidad, no solo sobre lo que sabemos, también sobre lo que ignoramos, lo que creemos que existe o debería existir, sobre nosotros mismos. Resulta así que una gran cantidad de ámbitos significativos del mundo y de la vida, tales como la naturaleza, la ciencia, el arte, la moral, el lenguaje, las matemáticas o la cultura, han segregado, por así decir, una reflexión filosófica sobre sus lineamientos principales. De ahí que hablemos de teoría o filosofía de la naturaleza, la ciencia o el arte, con pleno sentido, no como expresiones metafóricas ni sofisticadas (como se habla, por ejemplo, de la filosofía del ocio o del emprendimiento). Lo que significa, al propio tiempo, que la filosofía no es una disciplina