La Inquisición posmoderna: sobre la ideología woke y la cultura de la cancelación
La Inquisición posmoderna: sobre la ideología woke y la cultura de la cancelación Introducción Apenas se nota. Apenas nos damos cuenta. Cuando MacIntyre anunciaba que en nuestra época los bárbaros no esperan al otro lado de las fronteras, sino que llevan gobernándonos hace algún tiempo[1], parecía predecir lo que está sucediendo con la “dictadura silenciosa” de la cultura de la cancelación. Dicha cultura de la cancelación es el corolario de la llamada “ideología woke” que desde hace años acampa en todo el mundo académico anglosajón así como en todas las instituciones públicas, medios de comunicación, instituciones culturales, empresas, alta administración, mundo sanitario, etc. Este fenómeno está llegando a España y también a Francia, donde filósofos como Jean-François Braunstein[2] lo concibe como la “paranoia woke” e incluso habla de “terrorismo intelectual”. Expresiones demasiado contundentes en la era de la tecnología y de los mass media, donde las opiniones proferidas